Este mes de Enero hace siete años que abrimos al público nuestra casa rural en Toledo. Siete años de trabajo donde hemos tenido la suerte de conocer personas maravillosas con las que hemos compartido nuestro hogar y disfrutado de paseos por el campo, agradables conversaciones, conocimientos, partidas de cartas, juegos de damas, risas y baile.
No se nos ocurre otra manera de darles las gracias que con esta estrofa de un poema:
Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino. Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, mas otras apenas vemos entre un paso y otro.
A todas las llamamos amigos